Un día por debajo de las ideas
entre las ganas, los paradignmas
sembraré verdades, huellas y luchas
que tapen las dudas
con desnudas utopías
Recordando me quedé en aquel
cálido atardecer
el sol casi dormía, y su brillante luz
marcaba su bello semblante
su olor pululaba por doquier
su barba cuasi azulada
su carta dibujada entre una silueta
un susurral y su aliento
Camilo, Che y Trotsky
apenas , reverdecía
recordando a ese adorado tormento
coraje y valentía
y ese sonado conquistar
esa tierra es mía , es tuya y de aquel
y trás mi fusil como ritual
desnudaré una nalgada bañada de companía
como segunda de despedida
en mi mortal rebeldía
Hoy aquí donde estoy, la mañana esta fresca y soleada, un cielo azul se ve desde mi ventana, sorbiendo una taza de café , disfruto de tus palabras, que son mi desayuno y me renuevan la esperanza en la juventud soñada...
ResponderEliminar